Aranzadi presenta el primer Atlas moderno de aves reproductoras de Euskadi
El Atlas recoge una investigación científica exhaustiva de la riqueza de la avifauna de la comunidad autónoma
Con motivo del Día Internacional de las Aves que se celebró el pasado fin de semana, la Sociedad de Ciencias Aranzadi, entidad que investiga desde 1949 el mundo de la ornitología a nivel estatal, ha presentado el Atlas de aves nidificantes de Euskadi. La edición de este atlas, que recoge una investigación científica exhaustiva de la riqueza de la avifauna de la comunidad autónoma, la ha liderado el departamento de ornitología de la Sociedad de ciencias Aranzadi, con Juan Arizaga en la dirección.
Este experto ornitólogo explicaba durante la presentación que “esta investigación es una radiografía de la riqueza de la avifauna de nuestro territorio. A través de metodología científica, hemos conseguido tener la información más exhaustiva y rigurosa de la situación de nuestras aves: la cantidad de todas las especies reproductoras, el cálculo de la abundancia de especies o el tamaño de las poblaciones por hábitats, entre otros datos importantes”. Un trabajo que se ha realizado con expertos en ornitología que han ido contabilizando y tomando datos por cuadrículas o celdas de UTM de 5x5km, datos de aves anilladas, datos recogidos en la plataforma de visualización de fauna ornitho.eus, etc.
De esta forma el estudio de Aranzadi ha concluido que en la comunidad autónoma vasca se reproducen 180 especies de aves, entre ellas 175 especies autóctonas y 5 exóticas. Entre las especies más abundantes, presentes en todas las celdas registradas y con grandes tamaños poblacionales se encuentran: gorrión común con 390.000 individuos, el petirrojo europeo con 330.000 individuos, el chochín paleártico con 290.000 individuos, el mirlo común con 280.000 individuos, la curruca capirotada con 280.000 individuos, el pinzón vulgar con 270.000 individuos, el carbonero común con 210.000 individuos, y el reyezuelo listado don 160.000 individuos.
Entre las conclusiones de este libro también se puede afirmar que las especies en mejor estado de conservación son las forestales, como por ejemplo el picamaderos negro; mientras que las ligadas a medios agrarios se encuentran en peor situación. El 30% de las especies asociadas a estos hábitats (campiñas, campos de cultivos de secano…) han reducido significativamente su área de distribución desde comienzos de siglo. Es el caso del Alcaudón dorsirrojo, especie ilustrada en la portada de este atlas.